Los Washington Commanders juegan en uno de los estadios más antiguos de la NFL. FedEx Field abrió sus puertas en 1997, recientemente en términos humanos, pero hace una era en comparación con los estándares de estadios multimillonarios de hoy en día. Ubicado en Landover, Maryland, FedEx Field carece de las comodidades de élite que son comunes en estadios más modernos, y los problemas de infraestructura van desde tuberías que gotean hasta cercas que colapsan.
El exdueño de los Commanders, Dan Snyder, había intentado construir un nuevo estadio, pero la toxicidad que rodeó todo su mandato, desde demandas por agresión sexual hasta acusaciones de irregularidades financieras, y la controversia en torno al nombre anterior del equipo, cortaron de raíz todos los intentos de comenzar la construcción en otro lugar.
Ahora, con la partida de Snyder, nuevas esperanzas están surgiendo en todo el área de DMV: D.C., Maryland y Virginia, de que un nuevo estadio o una renovación significativa de FedEx Field podrían surgir. Unas instalaciones más modernas podrían llevar un Super Bowl al área de D.C. y serían un paso significativo para ayudar al equipo a recuperar el esplendor que perdió durante la era de Snyder, que duró un cuarto de siglo.
Los tres gobiernos en la zona de influencia de los Commanders están compitiendo, en cierto grado, por albergar un estadio de la NFL. Los procesos presupuestarios y las aprobaciones legislativas avanzan lentamente, pero con Snyder fuera del panorama, está claro que la acción está en marcha. Aquí está la situación del estadio en los tres distritos.
Distrito de Columbia RFK Stadium, el hogar de los Commanders antes de FedEx Field, todavía se encuentra en un terreno propiedad del gobierno federal en el Distrito. La alcaldesa de D.C., Muriel E. Bowser, ha convertido en una prioridad reurbanizar el área alrededor del estadio en deterioro, un proyecto que podría incluir atraer de nuevo a los Commanders al Distrito.
Pero antes de que eso suceda, el Congreso debe autorizar la reurbanización. A principios de esta semana, el Washington Post informó que dos comités, el subcomité de Recursos Naturales de la Cámara de Representantes sobre tierras federales y el Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, están programados para evaluar una legislación diseñada para abordar la parcela de RFK.
Si se aprueba, la Ley de Revitalización del Campus del Estadio Conmemorativo RFK extendería el arrendamiento del Distrito en el sitio por hasta 99 años y abriría oportunidades de desarrollo en el lugar. El arrendamiento actual está programado para finalizar en 2038 y solo permite actividades deportivas y recreativas en la propiedad.
Sin embargo, incluso con la autorización del Congreso, Bowser enfrenta una batalla cuesta arriba para traer de nuevo a los Commanders a D.C. El Consejo de D.C. está dividido en cuanto a si construir un estadio y, de ser así, si utilizar fondos públicos para mejoras en el estadio.
Maryland Maryland enfrenta desafíos independientemente de la decisión del estadio de los Commanders: cómo actualizar o reemplazar FedEx Field si el equipo decide quedarse en Landover y cómo reconvertir o demoler el estadio si el equipo se muda a otro lugar.
“Lo último que queremos es una estructura imponente, vacía, deteriorándose en nuestro patio trasero”, dijo el delegado estatal Jazz Lewis, quien representa el área alrededor de FedEx Field, a Yahoo Sports en abril. “Esa es la razón por la que hicimos el plan de inversión, para ayudar a seguir desarrollando esa área, independientemente de si el equipo se queda o se va”.
El gobernador de Maryland, Wes Moore, ha declarado repetidamente su intención de mantener al equipo en el estado. Los funcionarios de Maryland han creado el proyecto Blue Line Corridor, nombrado así por la línea del sistema de tránsito Metro que atraviesa la zona del estadio, para promover el desarrollo de uso mixto alrededor de FedEx Field. Todavía no hay dinero en el proyecto para construir un nuevo estadio, pero hay fondos para demoler el estadio si los Commanders se mudan.
Virginia Virginia ha sido sede de las actividades de pretemporada de los Commanders durante muchos años, y durante el mandato de Snyder, tres sitios potenciales en Virginia estaban en la contienda para el nuevo estadio. Dos de ellos fueron descartados debido a problemas de tráfico, dejando solo un sitio, en el condado de Loudoun cerca del Aeropuerto Dulles, como posible sede.
Recientemente, la Asamblea General de Virginia aprobó, y el gobernador Glenn Youngkin firmó un presupuesto con una enmienda que pedía $250,000 en gastos para “evaluar posibles incentivos económicos para atraer equipos deportivos al estado”. Cualquier incentivo económico específico tendría que esperar hasta que la legislatura se reúna a principios del próximo año.
En una carta de abril a Youngkin proporcionada a Yahoo Sports, los delegados de Virginia David Reid y Luke Torian señalaron que cualquier esfuerzo para ubicar un nuevo estadio en Virginia debe incluir disposiciones destinadas a “proteger a los contribuyentes de Virginia, asegurando que no nos queden con un estadio en mal estado, estableciendo puntos de referencia para garantizar que el proyecto se complete a tiempo y dentro del presupuesto con trabajadores bien remunerados de Virginia, y asegurando que los problemas de transporte y medio ambiente se aborden desde el principio del proyecto”.
La nueva propiedad ha sido ambigua acerca de los próximos pasos del equipo en cuanto al estadio. “Obviamente, somos bendecidos de ser bienvenidos por los tres jurisdicciones”, dijo el propietario Josh Harris recientemente al Economic Club de Washington, D.C., según WUSA. “Así que, vamos a involucrarnos rápidamente, porque apreciamos que cuanto antes empecemos, antes el equipo tendrá un nuevo hogar”.
Aunque la maquinaria gubernamental se mueve lentamente, está claro que la batalla por un nuevo estadio potencial será tan difícil como, y mucho más prolongada que, cualquiera que los Commanders enfrenten en el campo de juego.
Originally posted 2023-09-15 22:00:17.
